Igualdad (ligelighed) y diferencia (forskjel) en torno a la comunidad fraternal de S. Kierkegaard
Resumen: PRÓLOGO La filosofía del siglo XIX, en sus líneas más fundamentales y características, no puede entenderse adecuadamente sino en relación con la obra de Hegel. En efecto, la filosofía del siglo pasado constituye en gran medida una reacción contra el sistema hegeliano, a la vez que recog...
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| Autor principal: | |
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| Formato: | Artículo |
| Lenguaje: | Español |
| Publicado: |
Pontificia Universidad Católica Argentina. Facultad de Filosofía y Letras
2021
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| Materias: | |
| Acceso en línea: | https://repositorio.uca.edu.ar/handle/123456789/12939 |
| Aporte de: |
| Sumario: | Resumen: PRÓLOGO
La filosofía del siglo XIX, en sus líneas más fundamentales y características, no
puede entenderse adecuadamente sino en relación con la obra de Hegel. En efecto,
la filosofía del siglo pasado constituye en gran medida una reacción contra el sistema
hegeliano, a la vez que recoge no pocos análisis y planteamientos del filósofo alemán.
La más notable y radical reacción contra el sistema de Hegel corre a cargo de
Marx y del marxismo. El marxismo, entroncado originalmente en la izquierda hegeliana,
distingue y separa el sistema hegeliano (idealista) del método dialéctico. Aceptando
y transformando este último, la filosofía marxista invierte el sistema de
Hegel, proponiendo una visión dialéctico-materialista de la conciencia, la sociedad y
la historia.
Otra reacción contra el hegelianismo —reacción estrechamente vinculada a la situación
económica, social e intelectual resultante de la evolución industrial— es la representada
por el positivismo, especialmente por el de Comte. En este caso se reacciona
contra el racionalismo hegeliano en lo que puede tener de menosprecio de la
experiencia, con la pretensión de instaurar un saber positivo capaz de fundamentar
una organización político-social nueva. Al igual que Marx, Comte conserva, sin embargo,
aunque transformándolo, un momento importante del hegelianismo: el espíritu
objetivo.
El positivismo (tomado, en general, como una actitud reacia a la especulación filosófica
y proclive a considerar la ciencia como forma de conocimiento, no sólo
modélica, sino exclusiva) constituye por lo demás una constante en la historia del
pensamiento. A pesar de sus notables diferencias de planteamiento, cabe reconocer
esta línea en el empirismo del siglo XVIII, en el positivismo del siglo XIX y en el
positivismo lógico del siglo XX. |
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