Entre el aula segregada, las muñecas glotonas y los rostros maquillados. Un ensayo acerca de las representaciones generizadas de "la niña"

En este artículo nos interesa enfatizar la dimensión genérico-sexuada que ha tenido y tiene la infancia. Propondremos para ello algunas reflexiones que gravitan entre los aportes de la pedagogía, la filosofía y la historia de la educación, para problematizar los modos por los cuales la cultura repre...

Descripción completa

Guardado en:
Detalles Bibliográficos
Autor principal: Zemaitis, Santiago
Formato: Artículo publishedVersion
Lenguaje:Español
Publicado: Universidad de Buenos Aires. Facultad de Filosofía y Letras. Instituto de Investigaciones en Ciencias de la Educación 2021
Materias:
Acceso en línea:https://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/art_revistas/pr.12817/pr.12817.pdf
Aporte de:
Descripción
Sumario:En este artículo nos interesa enfatizar la dimensión genérico-sexuada que ha tenido y tiene la infancia. Propondremos para ello algunas reflexiones que gravitan entre los aportes de la pedagogía, la filosofía y la historia de la educación, para problematizar los modos por los cuales la cultura representa las normas de género a través de diferentes imágenes. Se trata de un ejercicio de revisión de cómo las agencias socializadoras (la familia, la escuela y el mercado) imprimen sobre la dimensión genérico-sexual de las identidades infantiles "femeninas". Nos detendremos en tres imágenes de distintas épocas, pero que están unidas en dicha construcción de las identidades, en particular en aquellas que representan y/o interpelan a las niñas y a la construcción de la feminidad, en tanto una de las primeras y más elementales normas del género. La primera imagen es un salón de clase de una escuela unisexual de niñas en los finales de la década de 1930; la segunda remite a la publicidad de la muñeca "Grasita" que data de mediados de la década de 1960; y, por último, mucho más reciente, una tercera imagen, compuesta por una serie de fotografías publicitarias, aparecidas en la revista de moda francesa Vogue en 2011. A través de estas representaciones de la infancia, iremos desglosando el argumento referido a que el discurso pedagógico moderno, como también la publicidad y el mercado, han resultado ser fuertes agencias de interpelación a la formación de las conciencias y los cuerpos infantiles, aludiendo a mensajes y guiones generizados y sexualizados, que atribuyen así a rasgos "naturales" las supuestas diferencias entre los dos -y solo dos- sexos: esto es la atribución de una identidad de género según la condición biológica (hombre = masculino/mujer = femenina): una feminidad "resguardada" de la proximidad con otros varones ("escuelas unisexuales").