Uso de creatina y magnesio en estudiantes de la carrera de medicina:: estrategias para sostener el rendimiento académico y las guardias

Los estudiantes de Medicina en el ciclo clínico enfrentan una alta exigencia física y cognitiva. Frente al estrés, la fatiga y el déficit de sueño, muchos recurren a suplementos dietarios como la creatina y el magnesio, buscando mejorar su rendimiento académico, físico y mental. Este trabajo busca...

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Detalles Bibliográficos
Autores principales: Gatica , M, Gómez Mercado, Y, Rian Roque, M, Grigorjev, CA, Ricarte Bratti , JP, Brizuela , NY
Formato: Artículo revista
Lenguaje:Español
Publicado: Universidad Nacional Córdoba. Facultad de Ciencias Médicas. Secretaria de Ciencia y Tecnología 2025
Materias:
Acceso en línea:https://revistas.unc.edu.ar/index.php/med/article/view/50578
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Descripción
Sumario:Los estudiantes de Medicina en el ciclo clínico enfrentan una alta exigencia física y cognitiva. Frente al estrés, la fatiga y el déficit de sueño, muchos recurren a suplementos dietarios como la creatina y el magnesio, buscando mejorar su rendimiento académico, físico y mental. Este trabajo busca describir el patrón de consumo, las motivaciones, los efectos percibidos y el conocimiento sobre posibles efectos adversos. Se llevó a cabo un estudio descriptivo, mediante una encuesta anónima, voluntaria, con consentimiento informado previo y autoadministrada a estudiantes de 3.º, 4.º, 5.º año y PFO de la carrera de medicina (UNC). El cuestionario incluyó preguntas cerradas y abiertas sobre tipo de suplemento consumido, frecuencia, situaciones de uso, efectos positivos y negativos percibidos, y grado de conocimiento sobre riesgos asociados. Se realizó un análisis estadístico descriptivo de proporciones para comparar los datos. La muestra final estuvo conformada por 77 estudiantes. Del total un 26,9% (21) consumía creatina y el 30,7% magnesio (24), con uso combinado en 2 casos.  Las principales motivaciones para el consumo fueron: aumentar energía (27,3%), combatir la fatiga (22,10%), mejorar rendimiento físico (22,10%), mejorar el sueño (18,20%) y la concentración (11,7%). Entre los efectos positivos, el 27,3% reportó mayor rendimiento físico, 14,3% una mejor calidad del sueño, 10,4% presentaron mayor energía , 9,1% notaron una mejor concentración/memoria y 15,6% no percibieron cambios. En cuanto a efectos negativos, el 54,6% no reportó ninguno, mientras que 5,2% mencionaron presentar problemas gastrointestinales, 2,6% insomnio y 1,3% ansiedad. En relación con el conocimiento, el 59,7% desconocía las reacciones adversas medicamentosas (RAM) y contraindicaciones, el 31,2% sí las conocía, y un 9,1% asumió erróneamente que no existen efectos adversos. Este desconocimiento representa un riesgo, sobre todo en el caso del magnesio, que en exceso puede causar hipermagnesemia, arritmias, hipotensión y daño renal. Se concluye que existe un uso frecuente de suplementos como estrategia de afrontamiento académico. Pero pese a beneficios percibidos, el desconocimiento generalizado sobre efectos adversos, particularmente del magnesio, es preocupante por potenciales riesgos renales y cardiovasculares, lo que justifica la necesidad de educación sanitaria y estrategias de uso seguro.