Re-habitar el centro de Córdoba - Arquitectura atravesada

El presente es acción. Es el momento en que la voluntad humana toma el legado inalterable del pasado y lo transforma en obra; el instante donde el trazo firme del arquitecto encuentra su propósito: dar forma al porvenir. El rehabitar el centro de Córdoba es devolverle su esencia a un lugar que ha qu...

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Detalles Bibliográficos
Autor principal: Gómez Figueroa, Guillermina
Otros Autores: Santillán, José Ignacio
Formato: Tesis de grado acceptedVersion
Lenguaje:Español
Publicado: 2024
Materias:
Acceso en línea:http://pa.bibdigital.ucc.edu.ar/4677/1/pdf24_unido%20-%202025-01-21T132720.156%20%281%29.pdf
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Descripción
Sumario:El presente es acción. Es el momento en que la voluntad humana toma el legado inalterable del pasado y lo transforma en obra; el instante donde el trazo firme del arquitecto encuentra su propósito: dar forma al porvenir. El rehabitar el centro de Córdoba es devolverle su esencia a un lugar que ha quedado olvidado en el tiempo. Las ciudades son y se volvieron, de una forma u otra, los corazones de nuestras sociedades, espacios repletos de cultura y oportunidades. Sin embargo, no podriamos definirlas únicamente por las estructuras de las que presumen y se componen; sino más bien, son los usos diversos y atractivos de los espacios urbanos los que les dan vida y, que a su vez, alientan a las personas a participar en la configuración de las mismas. La calle Maipú, eje del centro de Córdoba, se alza como un testimonio de tiempos mejores, un espacio que la ciudad ha dejado en pausa, pero que guarda el potencial de renacer con nueva fuerza. Esta intervención no es un gesto de nostalgia, sino una afirmación de futuro. Se propone un corredor que revitalice el tejido, conectando el río Suquía con la Plaza San Martín, uniendo naturaleza y arquitectura, hombre y ciudad. La arquitectura aquí no es mero refugio; es una máquina para habitar la vida contemporánea, un instrumento que activa el entorno, lo transforma y lo eleva. El proyecto organiza los elementos de lo construido en sinergia con el verde, abriendo espacios donde las miradas se cruzan y las relaciones humanas se forjan. En esta fusión surge una nueva forma de habitar: una arquitectura que no solo ocupa, sino que penetra la ciudad, la activa, la reescribe. El centro de Córdoba no será un recuerdo; será movimiento, vitalidad y encuentro. Será la confirmación de que la ciudad no pertenece al ayer, sino al mañana que construimos hoy.