Globalifobicos vs. Globalitarios en America Latina y el Caribe : fortalezas y debilidades de una sociedad civil regional emergente

En los dos últimos años, las manifestaciones de Seattle, Melbourne, Washington, Praga, Génova se han convertido en hitos de un proceso que ha puesto en la primera plana mediática1 a las movilizaciones anti-globalización y a una emergente sociedad civil global que, en forma creciente, p...

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Detalles Bibliográficos
Autor principal: Serbin, Andres
Formato: Working Paper
Lenguaje:Español
Publicado: Universidad de Belgrano Facultad de Estudios para Graduados 2012
Materias:
Acceso en línea:http://repositorio.ub.edu.ar/handle/123456789/727
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Descripción
Sumario:En los dos últimos años, las manifestaciones de Seattle, Melbourne, Washington, Praga, Génova se han convertido en hitos de un proceso que ha puesto en la primera plana mediática1 a las movilizaciones anti-globalización y a una emergente sociedad civil global que, en forma creciente, parece ir adquiriendo una influencia sobre el sistema internacional. Por otra parte, en Windsor, Québec y Porto Alegre, similares manifestaciones y concentraciones como las del Foro Social Mundial han puesto de manifiesto que nuestra región y el hemisferio no son inmunes a estos fenómenos y a las diversas formas de resistencia promovidas por los llamados “descontentos con la globalización”. El desarrollo de estos procesos, tanto a nivel global como hemisférico, evidencia una vez más la progresiva presencia en el sistema internacional de una serie de actores no-estatales con una amplia incidencia sobre los asuntos y temas internacionales, en el marco de un incipiente “multilateralismo complejo” (Cox 1997; O´Brien et al. 2000)2 de acuerdo a los especialistas, o de la “nueva diplomacia” según los funcionarios internacionales (Annan)3, articulados al desarrollo de la globalización. Esta presencia, además, se vuelve particularmente relevante cuando una multiplicidad de actores internacionales plantea la necesidad de profundizar, en el marco de los actuales procesos de globalización, en el desarrollo de una governanza4 global o cuestionan los presupuestos básicos tanto del proceso como de la distribución desigual de sus eventuales beneficios. Sin embargo, independientemente de su composición y desarrollo, la diversidad de actores que emerge en el sistema internacional no afecta la esencia de la globalización sino que le da una nueva configuración al proceso de acumulación de capital a nivel global y a las resistencias al mismo, con el despliegue de un conjunto de fuerzas heterogéneas y frecuentemente en colisión que hacen a la dinámica del mundo global. A la vez, pone en juego una diversidad de enfoques y actitudes ante la globalización y da lugar al despliegue de una diversidad de estrategias para adaptarse o resistir a ella. En este contexto, los actores no-estatales que aparecen en primer plano, no son sólo las corporaciones trans- y multinacionales, ni la banca privada, ni siquiera las instituciones financieras internacionales - protagónicos gestores de la nueva arquitectura de poder mundial asociada al desarrollo del capitalismo en esta fase globalizadora en conjunto con la persistencia (así sea redefinida) de los estados, sino un conjunto de organizaciones y movimientos que configuran un nuevo referente internacional bajo la ambigua y poco definida figura de sociedad civil global. El debate acerca de la configuración de esta sociedad civil global parece darse en la actualidad en torno a la relevancia y a las características de las organizaciones no-gubernamentales internacionales (ONGI), por un lado, y de los movimientos sociales globales (MSG), por otro, como sus componentes principales (Edwards 2001; O´Brien et al. 2000; Higgot et al. 2000). El énfasis en un componente u otro conlleva, a su vez, diferentes concepciones y enfoques acerca de la globalización y de su rol en su desarrollo, difícilmente integrables entre sí, pero que trataremos de esbozar esquemáticamente. De hecho, diferentes enfoques en la interpretación de la globalización implican diferentes visiones en la altamente compleja comprensión de la dinámica del poder y de la autoridad en las relaciones internacionales y de la posibilidad de introducir formas de governanza global (Serbin 1999; 2000). El eje de la discusión, sin embargo, gira en torno a la compatibilidad del desarrollo del capitalismo global con el desarrollo y la ampliación de formas de democracia liberal en el gobierno global del planeta.