El retrato Giacometti-Lord: la realidad capturada

Los caminos del arte se cruzan con la vida de manera impensada. A veces uno da cuenta del otro en un diálogo fecundo. Cuando eso sucede el chispazo de la obra en ciernes puede ser genial o una condena. En el año 1964 el escritor y crítico James Lord vivió la experiencia que lo inmortalizaría en el l...

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Detalles Bibliográficos
Autor principal: Russo Patricia; Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo, UBA
Formato: Trabajo revisado (Peer-reviewed)
Lenguaje:Español
Publicado: Congreso Internacional “Armando Capalbo” sobre experiencias y escrituras en la cultura de consumo 2022
Materias:
Acceso en línea:http://eventosacademicos.filo.uba.ar/index.php/CNEAC/IICNAC/paper/view/6484
https://repositoriouba.sisbi.uba.ar/gsdl/cgi-bin/library.cgi?a=d&c=cneac&d=6484_oai
Aporte de:
Descripción
Sumario:Los caminos del arte se cruzan con la vida de manera impensada. A veces uno da cuenta del otro en un diálogo fecundo. Cuando eso sucede el chispazo de la obra en ciernes puede ser genial o una condena. En el año 1964 el escritor y crítico James Lord vivió la experiencia que lo inmortalizaría en el lienzo: Alberto Giacometti pintó su retrato. Fueron dieciocho sesiones en las que el artista se debatió para plasmar la realidad a partir de su mirada y el modelo, en tanto, por acompañar ese proceso agotador. Lord lo contó en un libro. Años más tarde, Stanley Tucci logra financiación para el proyecto de llevar ese acontecimiento al cine. El resultado fue The final portrait, conocida aquí como El arte de la amistad, de 2017. Dos títulos elocuentes para un mismo film. Un París bohemio fue el escenario ideal para la emergencia de esa pintura particular y del vínculo que se fue gestando. El registro audiovisual nos permite espiar desde la ficción una obra de arte en proceso y el agónico debate del artista, contado por una de las partes. Esta vez, nosotros también miramos.