Recursos nucleares

En el año 1955 la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) inició sus tareas exploratorias por uranio en el ámbito de la provincia del Neuquén. El área más importante, investigada por la CNEA, fue la denominada Los Chihuidos – Las Cárceles, con un modelo de depósito estratiforme, en sedimentitas...

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Detalles Bibliográficos
Autor principal: Rojas, Guillermo E.
Otros Autores: Leanza, Héctor A. (ed.)
Formato: parte de libro bookPart acceptedVersion
Lenguaje:Español
Publicado: Asociación Geológica Argentina 2011
Materias:
Acceso en línea:http://rdi.uncoma.edu.ar/handle/uncomaid/17898
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Descripción
Sumario:En el año 1955 la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) inició sus tareas exploratorias por uranio en el ámbito de la provincia del Neuquén. El área más importante, investigada por la CNEA, fue la denominada Los Chihuidos – Las Cárceles, con un modelo de depósito estratiforme, en sedimentitas de la Fm. Rayoso. Otro sector de interés fue el denominado Rahué-Co con mineralización en un paquete sedimentario perteneciente a la Fm. Tordillo. En esta misma unidad estratigráfica se ubican las manifestaciones denominadas Butalón I y Butalón II. Más al sur de éstas, se localiza la denominada Charahuilla en niveles de la misma edad. La compañía Calypso Uranium está desarrollando dos proyectos exploratorios que pueden incorporar nuevas reservas de uranio. El origen y distribución del uranio estaría condicionado por la existencia de roca fuente, roca hospedante y elementos reductores asociados a materia orgánica y bitumen. Es aconsejable reconocer la existencia y distribución de petróleo biodegradado.