La formación solidaria: Un imperativo social

La vida en comunidad se fundamenta y se construye en la solidaridad porque, gracias a la incorporación de este valor, se reconoce y se valora la existencia del otro como nuestro semejante, como alguien que, a la vez, ofrece significado a nuestra existencia, en tanto nos permite reconocernos como otr...

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Detalles Bibliográficos
Autor principal: Giraldo Salazar, Juan Leonel
Formato: Artículo publishedVersion Artículo revisado por pares",
Lenguaje:Español
Publicado: Universidad de Antioquia 2010
Acceso en línea:http://aprendeenlinea.udea.edu.co/revistas/index.php/unip/article/view/7210
http://biblioteca.clacso.edu.ar/gsdl/cgi-bin/library.cgi?a=d&c=co/co-062&d=article7210oai
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Descripción
Sumario:La vida en comunidad se fundamenta y se construye en la solidaridad porque, gracias a la incorporación de este valor, se reconoce y se valora la existencia del otro como nuestro semejante, como alguien que, a la vez, ofrece significado a nuestra existencia, en tanto nos permite reconocernos como otro para los otros. Desde este reconocimiento es posible construir una ética social, cuya significación primordial radica en la superación de la omnipotencia infantil para inscribirnos en la vida comunitaria, renunciando a la primacía del capricho personal para avanzar en las realizaciones participativas que dignifican la existencia humana, dentro de un campo de relaciones que, conservando la independencia, satisface también la necesaria interdependencia. Palabras claves: solidaridad, comunidad, ética social, aprendizajes básicos.