Cuba y la OEA: cambio y continuidad
La Carta de la OEA proclamó la norma de gobernabilidad democrática que validó la importancia de la democracia representativa como central a la paz y estabilidad del hemisferio occidental. Aunque ese compromiso normativo tuvo sentido en la era de la política del buen vecino, el multilateralismo y la...
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| Autor principal: | |
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| Formato: | Artículo publishedVersion |
| Lenguaje: | Español |
| Publicado: |
Universidad de Salamanca
2010
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| Acceso en línea: | http://revistas.usal.es/index.php/1130-2887/article/view/5678 http://biblioteca.clacso.edu.ar/gsdl/cgi-bin/library.cgi?a=d&c=es/es-011&d=article5678oai |
| Aporte de: |
| Sumario: | La Carta de la OEA proclamó la norma de gobernabilidad democrática que validó la importancia de la democracia representativa como central a la paz y estabilidad del hemisferio occidental. Aunque ese compromiso normativo tuvo sentido en la era de la política del buen vecino, el multilateralismo y la no intervención, el abandono por Estados Unidos de esos principios desde la administración Eisenhower debilitó la norma y creó una crisis de legitimidad en la OEA a raíz de los casos de Guatemala en 1954 y Cuba en 1962. La aprobación de la Resolución VI en la reunión de cancilleres de 1962, excluyendo a Cuba de la OEA debido a la ideología marxista de su gobierno fue un caso de institucionalización contraproducente de la norma de gobernabilidad democrática. Este artículo explora el ciclo de retroceso y renovación de la norma de gobernabilidad democrática a través del examen del tratamiento de Cuba en la OEA desde 1962 hasta la Asamblea General n.° 39 de la OEA en San Pedro Sula en junio de 2009. |
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