El estado del Banco Mundial.
El Banco Mundial ha admitido gradualmente en los años noventa que el Estado es un actor importante del proceso de desarrollo que no puede ser suprimido fácilmente. Pero este intento de construir una imagen de un Estado "amigable" promotor del desarrollo, del que se continúa desconfiando, h...
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| Autores principales: | , |
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| Formato: | Artículo publishedVersion Artículo revisado por pares |
| Lenguaje: | Español |
| Publicado: |
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, UNAM
2013
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| Materias: | |
| Acceso en línea: | http://www.revistas.unam.mx/index.php/rep/article/view/37289 http://biblioteca.clacso.edu.ar/gsdl/cgi-bin/library.cgi?a=d&c=mx/mx-047&d=article37289oai |
| Aporte de: |
| Sumario: | El Banco Mundial ha admitido gradualmente en los años noventa que el Estado es un actor importante del proceso de desarrollo que no puede ser suprimido fácilmente. Pero este intento de construir una imagen de un Estado "amigable" promotor del desarrollo, del que se continúa desconfiando, ha conducido al Banco ha elaborar un argumento unilateral e inconsistente que -mientras identifica al Estado como el principal obstáculo para la reforma- idealiza al mercado, pasa por alto las contribuciones de los actores no estatales al mantenimiento del status quo, y minimiza el papel de las políticas redistributivas en la reducción de desigualdades. |
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