El iusnaturalismo en Colombia

Las Constituciones colombianas han sufrido de aquel tipo de enfermedades que ni matan ni curan. No porque hayan sido imperfectas o porque no se hayan cumplido, aunque las dos cosas han ocurrido. Se trata más bien de que nuestros problemas no se deban a las Constituciones. Además de la Constitución,...

Descripción completa

Guardado en:
Detalles Bibliográficos
Autor principal: Giraldo Jiménez, Fabio Humberto
Formato: Artículo publishedVersion
Lenguaje:Español
Publicado: Instituto de Estudios Políticos 1995
Materias:
Acceso en línea:http://aprendeenlinea.udea.edu.co/revistas/index.php/estudiospoliticos/article/view/15999
http://biblioteca.clacso.edu.ar/gsdl/cgi-bin/library.cgi?a=d&c=co/co-024&d=article15999oai
Aporte de:
Descripción
Sumario:Las Constituciones colombianas han sufrido de aquel tipo de enfermedades que ni matan ni curan. No porque hayan sido imperfectas o porque no se hayan cumplido, aunque las dos cosas han ocurrido. Se trata más bien de que nuestros problemas no se deban a las Constituciones. Además de la Constitución, hay que contar con el poder político: el del gobierno central, el de los mandos medios, el que representa el poder invisible de los grupos económicos y de los grupos de presión, entre otros. De estas formas subterráneas de ejercicio del poder, que son parte esencial de nuestra cultura política, una Constitución no dice nada. Porque sé que las formulas políticas tienden más a suscitar emociones que a promover soluciones, me preocupa que el optimismo sobre la Constitución, de la  que se habla con tanto fervor, sea más que nada una propaganda producida por la necesidad de acomodar las nuevas circunstancias a los viejos intereses o, en el mejor de los casos, el producto de un optimismo fatuo.