El H.I.V. como quiebre en la obra cronística de Caio Fernando Abreu

La reacción que dispara, en los cronistas de los años 80, el deseo y cumplimiento efectivo de superar la mera documentación de lo real, es producto del deterioro de vastos sectores sociales. La empresa era poder erigirse con nuevas estrategias que permitieran la apropiación cultural para así promulg...

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Detalles Bibliográficos
Autor principal: Read, Marina Valeria
Formato: article artículo publishedVersion Material Didáctico
Lenguaje:Español
Publicado: Programa Universitario de Diversidad Sexual (CEI-UNR) 2020
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Acceso en línea:http://hdl.handle.net/2133/18664
http://hdl.handle.net/2133/18664
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Descripción
Sumario:La reacción que dispara, en los cronistas de los años 80, el deseo y cumplimiento efectivo de superar la mera documentación de lo real, es producto del deterioro de vastos sectores sociales. La empresa era poder erigirse con nuevas estrategias que permitieran la apropiación cultural para así promulgar una nueva memoria colectiva que ponga a luz lo antes ocultado. La crónica irrumpe como el tipo de registro de la nueva experiencia urbana, posibilitando la incorporación de ciertas zonas de la cotidianeidad que superan cualquier paradigma canónico. Escritas entre 1986 y 1989, y entre 1992 y 1995, y publicadas póstumamente en 1996, las crónicas de Caio Fernando Abreu son el relato de los avatares y sucesos de su mundo contemporáneo. Estas crónicas están trazadas bajo el amparo desolador de la violencia de sentirse plenamente consciente de ser lo otro. Una particularidad con respeto a estas crónicas: se sitúan en un plano ambiguo que fluctúa entre el mundo ficticio y el mundo de “lo real”. El plano de lo ambiguo es el plano de estas crónicas: por un lado, lo real es un ente biplano, es la diferencia entre lo que uno percibe y lo que ocurre; y por el otro, la ejecución en técnica ficcional, es decir, lo netamente literario. Desde el doble plano de lo real y el de la “ejecución inventiva”, estas crónicas parten y se construyen. La hibridez de estas crónicas contiene en su amalgama la unión de los discursos “bajos” y “antiestéticos”, donde los espectros rasgados de la melancolía en primera instancia y luego del duelo y de la melancolía se pasean de modo constante en este entramado textual. La imposibilidad de elaborar un luto, el cual es necesario para las pérdidas materiales o simbólicas, es interpretada por Freud como la condición melancólica. La melancolía es vista como un estado más duradero que el de la angustia. En el estado melancólico el sujeto no conoce otra realidad de vida que aquella que pauta el luto no cumplido. El sujeto que se enuncia en estas crónicas, atraviesa el duelo, el cual es entendiendo como la reacción frente a la pérdida de la persona amada o de una abstracción como puede ser la patria, la libertad, un ideal; y la melancolía entendida como una reacción frente a la pérdida de un objeto amado, pero siendo éste de origen inconsciente (Freud 1917). La intención de este trabajo es, pues, analizar el quiebre que se produce en la obra cronística de Caio Fernando Abreu tras la noticia de ser portador de H.I.V y cómo operan el duelo y la melancolía, en esta ruptura.