Nachträglich en el cine: ¿Segundas partes nunca fueron buenas?
Existe una tradición en cine que dice que “segundas partes nunca fueron buenas”. La frase se utiliza para objetar la realización de secuelas o nuevas versiones de obras ya consagradas, las cuales estarían destinadas al fracaso. Y efectivamente la historia del cine abunda en ejemplos que lo confirman...
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| Autores principales: | , , |
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| Formato: | Artículo revista |
| Lenguaje: | Español |
| Publicado: |
Centro de Investigaciones y Estudios sobre Cultura y Sociedad
2025
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| Materias: | |
| Acceso en línea: | https://revistas.unc.edu.ar/index.php/eticaycine/article/view/48582 |
| Aporte de: |
| Sumario: | Existe una tradición en cine que dice que “segundas partes nunca fueron buenas”. La frase se utiliza para objetar la realización de secuelas o nuevas versiones de obras ya consagradas, las cuales estarían destinadas al fracaso. Y efectivamente la historia del cine abunda en ejemplos que lo confirman. Pero también existen honrosas excepciones. ¿Cuándo y por qué una segunda parte puede ser un acontecimiento que resignifique la primera y la trascienda? |
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